Al llegar a casa nada más fue ver cama para que por obra y gracia de la inercia cayera igual que la pluma de forrest gump, pero a eso de las 9pm, en lo mejor de mi sueño, recibo una llamada de mimejoramiga, que si podía venir a mi apartamento porque se le había presentado un inconveniente y necesitaba mi ayuda; al parecer tenía una conquista en proceso y por cosas del destino, la damicela, al igual que cenicienta, quedó sin una zapatilla en mitad de la carretera… y el tipo creyéndose príncipe la acompañó HASTA MI ALCOBA, y lo mejor del cuento, SIN MI PERMISO… -una de dos, o es gay o no sabe lo que es la privacidad, ya de plano el tipito me cayó mal, pero es mi amiga y se le veía muy contenta con él así que se la perdoné, pero que quede constancia.. lo tengo entre ceja y ceja-.
Luego de solucionar el problema, y mientras mi amiga le contaba a su principesapo que ella no entendía como alguien como yo podía estar enpijamada y dormida desde las cuatro de la tarde en víspera de navidad, comprendí que sería una incomprendida toda mi vida, y que aquellos que me quieren ya ni se molestan en entenderme porque se resignaron a aceptarme, recibí una llamada de alguien cuyo nick me hace recordar a una ciudad de Italia para invitarme a comer, como el comentario de Y me había hecho sentirme un poco mal y la presencia del principesapo me estaba quitando las pocas energías positivas que tenía acepté, porque sabía que sería una agradable compañía y siempre es bueno cultivar una amistad…
Luego de hacer magia para quitarme la cara de sueño y hacer el papel de niña educada recibiendo muy sonriente los halagos del principesapo hasta que se despidió, fuimos a comer a mi pizzería favorita -anótate un punto por la coincidencia o por haberlo leído en el blog… da igual!-
Y al final del día pude decir: Ayudé a una amiga en problemas, fui tolerante y tuve una agradable conversación…
Costennita 